La llamada brecha digital en educación lleva siendo un problema desde hace años, a medida que se van implementando las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en el ámbito educativo, se va desarrollando una brecha de clase, entre aquellos alumnos que tienen acceso a internet, dispositivos e impresoras y los que no.
Esto ya provocaba una exclusión académica entre quienes podían buscar información rápidamente desde su casa y los que tenían que ir a la biblioteca, entre aquellos que pueden imprimir su trabajo maquetado en casa y los que tienen que pagar en una imprenta.
Esto, que ya era un problema antes, se magnifica ahora que se ha establecido el teletrabajo y las clases on-line, ahora que el profesorado envía el temario y los deberes por correo electrónico. Ahora que, a falta de un protocolo común desde el Ministerio de Educación, cada colegio o instituto hace lo que puede como puede, vemos como la adquisición de habilidades y conocimientos funciona a dos o tres velocidades, entre quienes tienen acceso a las tecnologías y los que no.
A falta de un mapeo de necesidades en los diferentes centros de educación de Leganés, proponemos establecer tres criterios de accesibilidad que consideramos imprescindibles para garantizar la igualdad de oportunidades en lo que dura el confinamiento y más allá.
– Puntos de conexión Wifi gratuitos.
Establecer una o varias redes de acceso que garantice la conexión a internet desde cualquier domicilio.
– Reparto de dispositivos móviles (tablets preferentemente) para aquellos alumnos que los necesiten.
– Acceso a impresión por barrios y servicio a domicilio de los planes de trabajo que se envían desde los centros.
Solicitamos también una reunión telemática con la concejala de educación para conocer de primera mano las carencias concretas que, en este sentido, sufre nuestro municipio, para poder elaborar conjuntamente una respuesta que esté a la altura de las circunstancias.