El pasado 13 de mayo el alcalde de Leganés, Santiago Llorente, aseguró ,en plena campaña electoral, que el Ayuntamiento de Leganés llevaba tiempo en conversaciones para relanzar el centro de Arroyosur. Aseguró que el nuevo proyecto presentado cumplía las expectativas del consistorio de traer grandes empresas que generen empleos de calidad estables y bien remunerados.
Calificó de excelente noticia la transformación del El Corte Inglés Arroyosur en el nuevo “concepto comercial”, MAD-FD Fashion District, señalando que generaría, previsiblemente, un millar de empleos. Las cifras que se barajan son de entre 800 y 1000 puestos de empleo adicionales, según la empresa. El todavía alcalde se ha dedicado a publicar las bondades de este proyecto efusivamente en sus redes sociales y entrevistas, señalando que atraerá incluso clientela internacional.
El centro comercial cerrará las puertas en julio para iniciar las obras, con objeto de convertirse para la próxima primavera de 2020 en un almacén que recreará zonas turísticas de Madrid. Diseñado por Lázaro Rosa-Violan, se recrearán espacios como Sol, Malasaña, la Estación de Atocha o la Puerta de Alcalá, acoplando las tiendas adecuadas a cada zona.
Según lo comunicado, constará con un estanque y 150 marcas de moda, belleza, deporte y tecnología, que se sumaría a oferta de ocio y restauración, contando incluso con ganadores de estrellas Michelín en este ámbito. El nuevo proyecto de El Corte Inglés supone un centro comercial “en horizontal”, con dos niveles inferiores recreando Atocha, en una terreno de 170.000 metros cuadrados con 65.000 metros construidos y 3.500 plazas de aparcamiento.
Eduardo Sotillo, su actual director del área de Compras, indica que se trata de un concepto nuevo sin comparación en el mundo que se intentará replicar posteriormente en otras ciudades. La inversión prevista asciende a 100 millones de euros, de los que la mitad serán sufragados por las marcas. Sobre los empleados, se indica que todos lo trabajadores actuales serán recolocados y no habrá despidos tras el cierre de julio.
Se habla, empleando confusos términos de marketing, de un “enfoque experiencial”. Explican que se trata de un nuevo concepto de centro comercial de innovación y vanguardia en el que no solo se compra, sino que se vive, se disfruta y se comparte. Todas las marcas que se incorporen al proyecto dicen que desarrollarán sus servicios y experiencias personalizadas más allá de la compra. Indican que tendrán una oferta transversal con componentes de lujo y oferta en el precio, rechazando el concepto “outlet”.
“Prevén todo esto en base a un tipo que comercio que nunca se ha probado, construido en un entorno que ya ha fracasado y con el componente del lujo, cuando los municipios del sur metropolitano tienen una media de renta disponible bastante inferior a la media de la Comunidad de Madrid”
Dicen que dinamizará la zona comercial del sur de Madrid y afianzará el liderazgo de El Corte Inglés como impulsor de la innovación en el comercio.
Prevén todo esto en base a un tipo que comercio que nunca se ha probado, construido en un entorno que ya ha fracasado y con el componente del lujo, cuando los municipios del sur metropolitano tienen una media de renta disponible bastante inferior a la media de la Comunidad de Madrid.
Arroyosur abrió sus puertas en octubre de 2007, coincidiendo con el brutal estallido de la burbuja inmobiliaria de Estados Unidos, y se implantó en mitad de la nada en terreno de Leganés entre las poblaciones de Leganés, Fuenlabrada y Getafe, cerca de un polígono y un parque. Se convirtió en el centro comercial más grande de la empresa, aunque en la zona sur ya se disponía de los centros de El Corte Inglés de El Bercial en Getafe, Parquesur en Leganés y San José de Valderas en Alcorcón.
En Arroyosur invirtieron 200 millones de euros y se generaron 1526 puestos de trabajo. Se calculó un área de influencia de un millón de personas, pero el mastodóntico proyecto nunca llegó a ser rentable.
Desde hace dos años se lleva especulando la posibilidad de convertir Arroyosur en un Outlet, como se llevó a cabo con los centros de Nuevo Centro y Ademuz, en Valencia. Después se barajó el cierre y venta para utilizar la superficie como un hub logístico para distribuir pedidos online en Madrid. Esta opción se desestimó debido a la mala imagen que generaría y porque se reconocería la crisis de la compañía, aunque Decathlon no dudó en efectuar su único cierre en España en la tienda vecina de Arroyosur.
La deuda de El Corte Inglés les ha llevado a desprenderse de sus locales en los centros comerciales de Parquesur y La Vaguada
La deuda de El Corte Inglés les ha llevado a desprenderse de sus locales en los centros comerciales de Parquesur y La Vaguada, vendiendo unos 40.000 m2 por 160 millones de euros. Esto se une al varapalo jurídico conocido el pasado mes de abril, en el que le obliga a demoler parcialmente tres centros comerciales en Serrano, Méndez Álvaro y Campo de las Naciones, por haber construido en exceso.
Cuando el grupo inmobiliario Vastned vendió en 2014 ocho centros comerciales en España, ya anunciaba el exceso de centros. El nuevo outlet pugnará con el potente centro de descuentos de Nassica, a diez minutos por la M50, y con el remodelado Sambil en el propio Leganés, además del consolidado Parquesur, sólo en su entorno más próximo.
Precisamente Parquesur ha contado con un trato especial por parte de los diferentes equipos de gobierno de Leganés, como los convenios ocultos firmados en 1995 y 2010. Este trato especial se refleja, en parte, en los 1.700 metros cuadrados del centros comercial construidos sin licencia, como han denunciado nuestras compañeras de Ganar Leganés a finales de 2018.
En Podemos Leganés nos preocupa el exceso de euforia del Ayuntamiento con esta arriesgada apuesta comercial, subrayando la creación de empleo, sin tener en cuenta la situación de las 1526 personas contratadas inicialmente que verán su centro de trabajo cerrado el próximo julio.
No parece responsable gestionar este proyecto de la misma forma electoralista que la cesión de terrenos de Legatec a la Carlos III o la modificación de los contenedores de basura. Desde Podemos apostamos por dinamizar la economía local en la que se cree empleo de forma sostenible con el comercio de confianza, donde la economía de los consumidores revierta en la misma zona. Velaremos por implantar las condiciones para que el pequeño comercio supere la competencia de grandes superficies y sea el verdadero elemento dinamizador de la economía local y regional.